Este post ha aparecido previamente en Openbasque.net, un portal de un proyecto que gira en torno a la Innovación Abierta y sus implicaciones para con la organización empresarial.
El 1 de junio tuvo lugar en la sede del MIK, en Oñati, el taller de Políticas para la Innovación Abierta, al cual asistieron representantes de empresas como CAF, EROSKI, OBE-HETTICH, EUSKALTEL, Grupo GUREAK, además de Borja Lastra en representación de la Diputación Foral de Bizkaia y Joseba Amondarain y Nagore Manzano en representación de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
El 1 de junio tuvo lugar en la sede del MIK, en Oñati, el taller de Políticas para la Innovación Abierta, al cual asistieron representantes de empresas como CAF, EROSKI, OBE-HETTICH, EUSKALTEL, Grupo GUREAK, además de Borja Lastra en representación de la Diputación Foral de Bizkaia y Joseba Amondarain y Nagore Manzano en representación de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
El
taller abordaba el paradigma de la innovación abierta desde el enfoque
del territorio y de las políticas que favorecen este tipo de
innovación. Estuvo estructurado en dos partes principales. Una primera
parte de presentación de las motivaciones de las políticas de innovación
y los elementos clave para el análisis de una política de innovación
abierta, sugiriendo un modelo de análisis. Además de los ámbitos de
actuación, este modelo identifica dos principales dimensiones de
análisis: por una parte; el comportamiento de la empresa, o lo que es lo
mismo, el conjunto de prácticas desarrolladas cuando se favorece la
innovación abierta (redes, colaboración, emprendimiento, gestión de la
propiedad intelectual, I+D, etc.) y por otra; las condiciones externas
que influyen en la capacidad para llevar a cabo este tipo de innovación
en las empresas (gran stock de conocimiento, personal altamente
cualificado y móvil, buen acceso a financiación, etc.).
En esta
primera parte expositoria también se referenciaron casos
internacionales de diversas regiones que han sabido abrazar el paradigma
de la innovación abierta, Y por último (pero no menos importante), nos
detuvimos en los elementos que favorecen la innovación abierta en el
caso del País Vasco.
Una vez
terminada esta primera parte de la jornada dimos paso a un debate entre
todos los asistentes, para que pudieran expresar su opinión y
pudiéramos recoger las aportaciones, de cara a conseguir conclusiones
relevantes.
Como siempre y como ha sido la tónica habitual del proyecto, los
representantes de las empresas jugaron un papel clave, ya que sus
aportaciones y su "sentir" son siempre unos "inputs" muy valiosos de
cara a "medir la temperatura" de la innovación abierta en nuestro
entorno. En esta ocasión teníamos una situación privilegiada al
poder sentarlos junto a representantes de instituciones públicas con
responsabilidad en el fomento de la innovación en sus respectivas
territorios.
Resultó
también interesante contrastar los casos de Holanda, Taiwán y Corea del
Sur, con sus respectivas fortalezas y debilidades, con el ecosistema de
programas, agencias y entidades que conforman el sistema de innovación
del País Vasco. En este sentido, si bien todo es mejorable, la
mayoría de las empresas veían con satisfacción el abanico de opciones y
posibilidades que se plantean a las empresas vascas para innovar,
desde el gobierno y las diputaciones. Por ello, aunque reconocían
aspectos a mejorar, sentían que vivían en una situación privilegiada
respecto a otros entornos.
Por resumir y citar los ejemplos internacionales, pudimos ver como las fortalezas de Taiwán residían en dos puntos; el énfasis en las alianzas internacionales de cara a mantener el control sobre varios segmentos de la cadena de valor, y el emprendimiento tanto en la educación como en el desempeño laboral. En el caso holandés, vimos como su modelo económico basado en la competitividad y en los incentivos salariales ha tenido grandes resultados y en el caso de Corea pudimos comprobar como la involucración de las empresas privadas en la inversión en I+D+i ha tenido unas más que importantes consecuencias en el desarrollo económico del país.
Por
último, nos gustaría reflejar algunas de las aportaciones que hicieron
las empresas para mejorar el sistema de innovación del País Vasco, las
cuales creemos que son muy valiosas:
- Los programas tecnológicos se suelen "quedar cortos", ya que los tiempos de desarrollo son más largos que los que se establecen en las convocatorias.
- Los programas que favorecen la innovación en las personas suponen un gran cambio en las empresas.
- La burocracia que suponen los programas de I+D+i suponen un escollo grande a la hora de participar en ellos. La mayoría de empresas prefieren recorrer este camino de la mano de algún socio.
- Las PYME´s a veces carecen de programas específicos para fortalecer su capacidad de innovación.
- La crisis ha obligado a las empresas a ser más eficientes y solamente acudir a convocatorias muy ajustadas a sus necesidades.
- Los espacios diseñados para que sean foros de encuentro entre empresas y zonas de colaboración entre agentes son muy valorados por parte de las empresas.
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